Seleccionar página



Hola,

Quiero contarte algo.

Mira…

Hace 40 años, una socióloga alemana inventó La espiral del silencio.

Vale, ¿por qué me debería importar?

No sé si eres de los que lees libros con frecuencia; si no es así, puedes cerrar este email.

O quizás no… tú verás.

Seguro que alguna vez te ha pasado. Estás con amigos y critican con vehemencia

aspectos sobre los que realmente —no nos engañemos— no tienen ni puñetera idea.

Tú sí, pero te callas.

No te sucede solo a ti. Es muy frecuente. Es el síndrome del cuñado. Técnicamente, el Efecto Dunning-Kruger.

Es una pena…

Tenemos miedo a parecer unos sabelotodos.
Tenemos miedo a opinar de forma contraria a la masa… aunque sepamos que se van directos al precipicio.

Robe Iniesta lo sabía y cantaba en Extremoduro:

De pequeño me impusieron las costumbres,

me educaron para hombre adinerado,

pero ahora prefiero ser un indio

que un importante abogado.

¿Esto qué tiene que ver con La espiral del silencio?

Es precisamente esto. Las opiniones informadas suelen verse silenciadas por las arrogantes no informadas que creen conocerlo todo.

«El necio habla, el sabio calla».

Para saber más, tienes disponible en Amazon mi libro Nacidos para aprender. Donde tú también descubrirás otros modelos mentales como este.



Fernando
Píldoras del Conocimiento



WordPress Video Lightbox